Era una torre restaurada del siglo VI, que tras pasar por Guerras, quedó notablemente deteriorada. Hace unos años, cuando heredé Hogwarts, a la muerte de mi padre Albus Dumbledore, me enamoré de aquel torreón, alto, moderno, lujoso y muy luminoso.
Tenía cuatro habitaciones, cocina, dos baños, hall, tres terrazas, piscina interior y exterior, y tambien un invernadero.
Sus terrazas, daban a la playa dos de ellas y una al monte, donde a lo lejos se podía visualizar el Castillo de Dumstrang.
Reformé aquel lugar por completo, al igual que el Castillo, fundiendo Vanguardismo con nuevas tecnologías, que harían de Hogwarts un lugar mas moderno y cómodo, a la vez que habitable y bello.